Lo que no pase en 'Sálvame', no pasa en ninguna otra parte. Ayer, Belen Esteban protagonizaba la caída más impactante en la historia del programa, y el listón estaba alto. Habíamos visto a Chelo partiéndose la Crisma, a Lydia llorar del dolor y a Kiko Hernández en silla de ruedas, pero jamás habíamos sido testigos de un guarrazo como el que ayer protagonizó la ex churri de Jesulín. Nada más comenzar la tarde, Belén se partía media pierna en directo.
Sí señor, la Esteban se descuajaringó la pierna derecha delante de toda España. Todo comenzaba como un juego. Como si de una prueba de 'Supervivientes' se tratase, los colaboradores debían colgarse una barra metálica y aguantar el máximo tiempo posible. La Lozana y Belén fueron la primeras en probar suerte, pero la Esteban terminó espatarrada cuestión de segundos.
Belén agarró la barra, separó los pies del suelo y su cuerpo quedó como el de un lechón en la carnicería. Sin embargo, aquello no duró más de tres segundos. Las manos de la Esteban se resbalaron y cayó como un saco de patatas. Nada más rozar el suelo, puede verse cómo el pie de la colaboradora hace un giro de lo más sospechoso.
"¡Me he roto el tobillo!", gritaba muy segura de haber escuchado un 'crash' al caer desplomada. Sus compañeros intentaron tranquilizarla hasta que una ambulancia la recogió del plató. La llevaron al hospital de La Luz y allí fue informada del diagnóstico: rotura de tibia y peroné y reposo absoluto de entre seis y ocho semanas.
A moco tendido, Belén llamó a su madre para intentar tranquilizarla. También habló con 'el Miguel' y, suponemos, hizo lo mismo con su retoña. Según dijo Omar Suárez, el enviado especial para cubrir la rotura de la Esteban, la colaboradora no paraba de gritar: "¿Tú crees que esto es normal?"
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