Desde luego que llevar un matrimonio a buen puerto es todo un arte, eso está claro. Y cada uno intenta llevarlo de la mejor manera que se le ocurre, intentando buscarse sus pequeñas estrategias para poder sobrevivir al día a día y para algunos, como Eva Longoria, el secreto está en permanecer lejos de su marido, pues de esta forma la hace mantener unos vínculos más sólidos con él.
Y la verdad es que creo que eso es una manera muy cobarde de hacer frente a un matrimonio, porque precisamente lo difícil es eso, el estar ahí día a día al pie del cañón, enfrentándose a los problemas que surjan en la pareja y devanándose los sesos en intentar encontrar soluciones. Por supuesto que si se ven de Higos a Brevas, los 3 o 4 días que pasen juntos no creo que discutan, ni muco menos, de ahí que ella lo vea como un matrimonio sólido:
“Cada vez que nos vemos es como una luna de miel, pues usualmente no podemos pasar más de tres días seguidos, lo que hace que apenas nos peleemos. Todas las tonterías por las que discuten otras parejas, nosotros nos las evitamos."
Y yo pienso que no, que en verdad lo que hacen es ocultar los problemas y camuflarlos porque, precisamente, de la convivencia surge el roce pero del roce es de done más se aprende, y permaneciendo alejados el uno del otro, así no se consigue absolutamente nada. Yo que tu me lo replanteaba Eva, me lo replanteaba.
Vía | Prensa Corazón