Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia continuan tan enamorados como el primer día. Tras superar el chaparrón mediático que los mantuvo en el punto de mira durante varias semanas, la pareja vive feliz en Vitoria lejos de cualquier camara de televisión. No quieren dinero, fama ni exclusivas. Son felices el uno con el otro, a solas, escondidos en su particular retiro.
Mientras el resto de enamorados de gastan pastizales en viajes de ensueño, Urdangarin y Ainhoa se conforman con un camino de tierra por el que pasean casi a diario. Les gusta alejarse de la ciudad cada vez que tienen ocasión, y su lugar preferisdo para hacerlo se encuentra a escasos kilómetros de su hogar.
Tal y como publica Vanitatis, se trata de un largo camino agrícola, conocido con el nombre de camino de la Imagen, perteneciente al pequeño pueblo alavés de Zurbano, en el que residen alrededor de 150 habitantes.
“Se encuentra aproximadamente a 5 kilómetros de Vitoria capital y se puede llegar a través de un desvío de la autovía, además hay un aparcamiento cerca... El aparcamiento suele estar siempre vacío, pero cuando nos los hemos encontrado había un par de coches más", desvela un testigo al citado medio.
“Es normal que vayan allí en búsqueda de tranquilidad, yo también voy para desconectar un poco del ruido de Vitoria, porque no hay casi gente. Además, los pueblos que hay alrededor son de chalets y casitas bajas, es gente de bien, que no está pendiente de estas cosas ”, aseguran.
Eso sí, no van solos. Al parecer, los tortolitos siempre van protegidos por un par de guardaespaldas que acompañan desde hace años al ex duque de Palma: "Detrás de ellos, como a 50 metros o menos, van dos hombres, que tienen pinta de ser los guardaespaldas, pero vestidos de paisano también con vaqueros y zapatos. Uno con cazadora de cuero marrón y bandolera, y otro con abrigo negro", asegura un testigo al citado medio.
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