La encerrona de David Broncano a Mónica Naranjo en 'La Resistencia': esta fue su reacción al ver más imágenes (de gente chiscando) para ella en directo

Mónica Naranjo se ha dejado caer por 'La Resistencia', ese descampado con David Broncano como gorrilla (que siempre pregunta por dinero) donde van a parar todas las sobras del decorado de 'El Hormiguero'. La cantante que no lloró, Aitana, no lloró ha acudido al programa de Movistar+ para presentar su nuevo programa de Netflix 'Amor con fianza', que viene a ser un primo hermano pijito de 'La Isla de las Tentaciones' que cuenta con pantallones de catorce mil pulgadas en vez de tablets de 3x2 cargadas por el diablo (no tienen baterías normales). Vamos, un zasca a dos manos a Telecinco tras no haberle pagado lo suficiente para seguir presentando las ediciones posteriores a la de Fani y Christofer.

Mónica Naranjo; que dice que presenta, canta y cocina de puta madre al más puro estilo Cristiano Ronaldo (guapo, rico y buen jugador); ya va ejerciendo de celestina por la vida tras sus dos experiencias deshaciendo y recomponiendo parejas en los distintos realities que ha trabajado. Me la imagino en el Mercadona emparejando al frutero con la del pasillo de conservas o advirtiendo al del estanco de al lado de su casa que no se vaya a por tabaco para no volver, que todo el mundo sabe donde trabaja. Así lo ha demostrado al ser cómplice de una cita que Broncano ha organizado entre dos "personas espontáneas" del público sin saber la encerrona en la que le estaba metiendo.

Mónica, hay más imágenes para ti (y peores que las de Christofer)

David y Mónica prepararon una cena de lo más romántica en una de las salas contiguas al teatro con una cena gourmet al más puro estilo cumpleaños en el Chiquibolas, con medias noches de Nocilla, ganchitos, aceitunas sin hueso (se vayan a atragantar con otra cosa que no sean sus...) y litronas de Fanta de Mónica Limón y Mónica Naranjo. En varias conexiones, el presentador y la cantante fueron descubriendo cómo iba avanzando la cita entre estos dos tortolitos "elegidos al azar" hasta que, en uno de los pinchazos de cámara, vieron cómo el chico ayudaba a la chica a sentarse en el tocador, por lo que sea, sin pantalones ninguno de los dos.

La cara de la presentadora de 'Amor con fianza' podía medirse de forma métrica, con rima asonante y ser considerada de arte mayor, porque era todo un poema. Mónica se metió en las carnes de Christofer o Melyssa por un momento al ver cómo los dos espectadores bailaban el dembow sin ropa a escasos metros de ella emitiendo onomatopeyas de sus placeres a grito pelado.

"He cogido el oso para protegerme, ¡qué imagen! ¡qué culo! ¿Tenía pelos? La verdad siempre supera la ficción", reaccionó la cantante abrazada al maxi Rosito gigante que había en el sofá mientras que Broncano lloraba de la risa: "¿No decías que el chico tenía buen culo? Pues ahora te lo has comido tú también", le soltó el presentador a su invitada mientras que esta trataba de volver a encajar su cara, que se le quedó como a la señora Patata.