De copa en copa y tiro porque me toca: las fiestas sin límite de Froilán, el animal nocturno de la familia real

Felipe Juan Froilán de Marichalar ha sido pillado, de nuevo, practicando su hobbie favorito: ir de copas con sus colegas. Desde que era un renacuajo, la sociedad española era consciente de que aquel niño sería un terremoto, lo que nadie imaginaba es que también sería el rey de las tarimas. No hay discoteca o pub que se le resista, el nieto de Don Juan Carlos parece haber heredado el espíritu fiestero de su yayo.

El tío es todo un vividor. Cada fin de semana, Froilán (alias el 'technoadicto') se pasea por los mejores garitos de la capital para correrse unas juegas de infarto. La última ha sido hace apenas unos días y el programa 'Ya es mediodía' ha sacado a la luz unas imágenes nada sorprendentes del muchacho. Pitillo en mano y rodeado de amiguetes, el hijo de Elena de Borbón se pega un buen fiestón.

Al parecer, el muchacho estaba relajado disfrutando del ambiente hasta que se percató de la presencia de bastante gente desconocida y puso rumbo a la sala VIP del garito, su hábitat natural. Hay que ver, este chaval si que sabe disfrutar de la 'laif'. ¿Cuándo nos invitas a una de esas, majete?

Tan solo una semanas después de ser multado junto a su hermana en Marbella, el rey de todas las 'parties' de Madrid se refugia en la noche para olvidar el mal trago. No se le conoce oficio y tampoco parece estar estudiando, pero no le falta el 'money' para sus juergas entre amigos. Leñe, Froi, enséñanos el truco.