Carmen Borrego, triste y en bikini, chapotea en Málaga mientras espera una llamada: necesita un trabajo

Lo contó ella misma en una revista. Necesita trabajar para poder llevarse un currusco de pan a la boca. No tiene ahorros, le gusta vivir bien y el final de 'Sálvame' le cayó como un jarro de agua helada. No esperaba frenar su facturación de manera tan abrupta. Ahora, triste y en bikini, pasea por las playas de Andalucía en busca de una oportunidad laboral.

Entre el pescaíto frito a media tarde y las cañitas bien frescas, Carmen se lamenta por su situación económica. Prefiere no mirar su cuenta bancaria, pero sabe cuál es la realidad: no hay chuquela. Pudo ahorra durante años, cuando ganó verdaderos pastizales en televisión, pero prefirió gastarlo en restaurantes, vacaciones y operaciones estéticas.

Ahora tan solo tiene la compañía de su familia y con eso tiene que conformarse. Se encuentra en Málaga, en su paraíso particular, y allí disfruta de su marido y de su hija. En las imágenes publicadas por Semana, vemos a Carmen chapoteando en las playas en las que tanto jugó con su hermana durante la niñez. Una niñez de abundancia que, por la mala gestión económica de todas las Campos, se esfumó.

Lo tuvieron todo, peor María Teresa invirtió en aquella mansión en la vivió durante años y terminó sin un duro. La tuvo que vender más barata y buscarse un pisito en Madrid. Terelu, gastadora nata por naturaleza, tampoco ha sido la reina del ahorro. Ahora disfruta de sus ingresos tras grabar el docurality para Netlix junto sus compis del programa de las frutas, pero no tiene mas proyectos laborales en el horizonte.

Fotos: Semana / Gtres