El adjetivo calificativo femenino singular con cierto tufillo machista "cerda" ya estaba tardando en salir en 'La Última Tentación'. En el capítulo cinco, esta palabra ha hecho su entrada triunfal en las tramas de la jet set del mamoneo y ha sido durante la hoguera de Mayka, con ella como principal destinataria. La Bratz murcianica ha acabado llorando tras ver por primera vez las imágenes del paso de su novio Alejandro Bernardos por 'La isla de las Tentaciones' de los repetidores.
La viuda de Rosito ha sido la primera en enfrentarse a la tablet que no carga una batería, sino que la carga el diablo. En ella ha visto unas imágenes de Alejandro reaccionando al mamoneo que Mayka se traía cuando estaba en la casa del grupo de 'Infieles nada anónimos' en Villa Playa: "Me doy cuenta de que Mayka no ha aprendido absolutamente nada de cuando estuvo aquí la última vez, no sabe valorar una relación, no sabe lo que es el respeto. No tiene ningún código ni ningún valor", comenzaba diciendo el armario empotrado que no tiene nombre sueco.
Alejandro se ha quejado de lo poco valorado que se ha sentido por su novia cuando esta ha venido a decir de él que es un soso manío: "Lo que pasa es que no puedo ser yo mismo con ella porque me dice 'te estás riendo con esa, has mirado a la otra'. Me ha anulado. No es solo es físico, es lo que lleva por dentro y es muy distinto a lo mío. Voy a dejarme llevar en todos los sentidos", prometía darnos contenido y hacer honor a su apellido Bernardos.
La reacción de Mayka se ha basado en estar más cabreada que una influencer sin batería en el móvil: "Estoy flipando. Desde que estoy con él nunca le he faltado el respeto, nunca le he controlado. Es él el que me dice cómo me tengo que comportar. Veo que no me acepta tal y como soy por faltas de respeto como cuando ha dicho que me voy a quedar sola. No me lo esperaba", ha comentado tras ver estas imágenes de su chico soltando perlitas de ella.
"Es una cerda"
Alejandro se ha desahogado con Gonzalo Montoya, exrollete de Mayka, sobre lo muy diferentes que son y de la ansiedad que le provoca la personalidad de su chica: "Somos personas con valores diferentes, eso a los 30 años se nota. Somos el agua y el aceite y yo he perdido veinte kilos desde que estoy con ella, brother", le contaba el extronista al experto Pokémon (así definió a su ex Susana) en la piscina de Villa Playa. Cada vez que los veo con los vasos de cristal, sufro... Se ve que ya voy teniendo una edad.
Para Mayka, que su chico hable mal de ella es mucho peor que verlo enrollarse con otra: "Ese es el miedo que yo tenía. Que llegara allí y empezaran a comerle la cabeza. Más con Gonzalo, que no tiene nada que hablar de mí porque lo hace para meter mierda. Estará despechado porque no he querido nada con él y he pasado de su cara. ¡Por eso no avanzo con Alejandro, por esta mierda!", le ha gritado a Sandra Barneda rompiéndose a llorar.
El remate del tomate que ha dejado frita a Mayka ha sido una conversación de su chico con Patri Pérez Iglesias, también conocida como Pinocha. Ambos desconfiaban de lo que podrían hacer Lobo y la murciana al irse de intercambio a Villa Luna: "Es un puto cerdo y ella una cerda", le soltaba la novia de Lester a Alejandro, cuya reacción ha sido asintomática a pesar de que estuvieran insultado a su novia.
"¿Esa es Patri?", preguntaba Lester demostrando que no se ve tres en un burro en la tablet de media pulgada, que ha sido incapaz de reconocer a su novia en esas imágenes.
"Ostia, ostia. No sé porqué Patri ha hablado de mí así. No entiendo porqué Alejandro no da la cara por mí. A día de hoy, no necesito a nadie. ¡Es muy fuerte! ¡Que yo estoy aquí para demostrarle a él porque él no confía en mí! Nunca ha confiado y he venido por él. No sé qué tan malo ha podido ver de mí", confesaba Mayka más rallada que cualquier superficie que roce una pierna de pelos depilados hace una semana.
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