Se avecina un verano entretenido para Leonor. Y no, la muchacha no se va de vacaciones a Salou con sus amigas ni moverá el esqueleto en ningún festival. Ella no es como el resto de mortales. Es la heredera y con los cargos van las cargas. Y para cargas, las que tendrá que soportar durante el estricto entrenamiento veraniego al que debe someterse.
Sí señor, doña Leonor se va a pegar una buena temporada haciendo flexiones, sentadillas y burpees. Levantará pesas, quemará la cinta de correr y sudará la gota gorda en los jardines de Zarzuela mientras su entrenador grita: "¡Vamos, princesa, no me sea floja!".
Tal y como publica ElNacional.cat, la hija de Felipe y Letizia debe estar en forma antes de ingresar en la academia militar de Zaragoza. Por muy VIP que sea, aquí no se andan con tonterías. La flacidez y el vagancia no tienen cabida en el cuartel, y precisamente por eso, Leonor deberá ser capaz de correr 45 minutos en carrera continua y hacer 100 flexiones diarias.
De aquí a unos meses, Leonor será 'la princesa musculada'. Y ojo, porque no es esta la única tarea costosa a la que debe enfrentarse. También ha comenzado el estudio para obtener el carnet de conducir. Es decir, podría estar haciendo test sin parar en su habitación de Zarzuela. Cuando cumpla los 18, continuará con el práctico.
A modo de consolación, la joven pasará unos cuantos días en el palacio de Marivent, en Mallorca. Allí disfrutará de las playas, del buen tiempo y de la mejor gastronomía. Eso sí, nada de ensaimadas.
Fotos: Gtres
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