Los planes de Irene Urdangarin cambian a la misma velocidad que las gafas de pasta de Ana Roda Quintana. Un día la sitúan estudiando en la Universidad, después dicen que está en Zarzuela y, ahora, las últimas informaciones demuestran que la hija de Iñaki y doña Cristina permanece en Ginebra. Aunque su intención sigue siendo recorrerse el planeta con la mochila al hombro, ha empezado por una actividad más sencilla.
Irene debe tener cabeza llena de ideas. Y es normal. Tiene 18 años y no ha decidido a qué dedicar su existencia. Le gusta al hostelería y quiso formarse en ese campo, pero se arrepintió en el último momento y lo comunicó a sus progenitores. Tras una intensa charla, decidieron que la niña debía aclarar sus ideas mientras se sacaba el carnet de conducir.
Se publicó que la joven se instalaría en Zarzuela para acudir a diario a la autoescula de Móstoles, sin embargo, Irene no ha hecho todavía las maletas. Por el momento, se encuentra en Suiza y allí colabora con la Cruz Roja. Tal y como publica la revista del saludo, la Urdangarina "asiste a a un Curso de asesoramiento en la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja".
¿El motivo? Buscar consejo y destino como cooperante. Es decir, es el paso previo a viajar a Camboya o a la India, dos de los lugares que Irene tiene en mente. En lo que respecta a su permiso para conducir, parece ser que tendrá que esperar.
Fotos: Gtres
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