La infanta Cristina está hasta el moño de tanto cotorreo barato. Lleva meses siendo la protagonista de miles de informaciones acerca de su situación con Urdangarin. Primero se dijo que la relación estaba rota, después se especuló sobre una segunda oportunidad y, finalmente, ha salido a la luz la verdad: la hija de Don Juan Carlos no quiere ver ni en pintura a su todavía marido.
Tal y como hizo público Pilar Eyre, la infanta ha tomado la decisión firme de poner fin a su matrimonio. Según la periodista, Doña Cristina pronunció las siguientes palabras: "Respeto la institución del matrimonio, llevo el anillo desde hace casi veinticinco años y lo voy a seguir llevando hasta que me divorcie, ¡quiero que el mundo sepa que yo no tengo nada de qué avergonzarme!".
Con estas declaraciones, la infanta habría dejado clara su intención irrefutable de divorciarse, sin embargo, es su propio entorno quien niega rotundamente que la hija de Don Juan Carlos haya abierto el pico. En concreto, aseguran que Eyre miente como una bellaca: "¿Cómo se puede publicar una cosa así sin contrastar, ni mostrar un documento ni siquiera identificar a las fuentes?", se pregunta el entorno de Doña Cristina, según publica Informalia.
"La infanta no ha hablado, excepto en el comunicado conjunto que ya se difundió. Es absolutamente falso que haya dado declaraciones, que le pase pensión alguna a su marido o que Iñaki Urdangarin vaya a trabajar en un medio de comunicación", dice el círculo más cercano a la todavía esposa del ex duque de Palma.
Y para rematar, disparan directamente contra la periodista: "Es el colmo que Pilar Eyre, en un alarde de osadía sin precedentes, afirme que la infanta ha elegido su revista para explicarse". Ella, segura de haber contado la verdad, se ha limitado a asegurar en Espejo Público que la información que dio es real.
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