Iñaki Urdangarín, de juerga loca días antes de firmar el acuerdo definitivo (y millonario) con la infanta Cristina

Para qué agobiarse pudiendo disfrutar de una buena comilona. O para qué llorar pudiendo reír a carcajadas alrededor de una mesa repleta. Esa es la nueva filosofía de Urdangarin. Aquel hombre serio y siempre distante con la prensa ha dibujado una sonrisa en su rostro. Ahora le gusta salir, ponerse las botas en los mejores restaurantes y brindar con sus colegas.

Sin duda alguna, Iñaki tiene motivos para celebrar. Hoy, lunes 5 de junio, su hija Irene cumple la mayoría de edad. Es decir, el acuerdo de divorcio ya puede ser firmado. El acuerdo definitivo, ese que llenará la cartera de Urdangarin en un abrir y cerrar de ojos, se hará oficial de un momento a otro.

El matrimonio decidió esperar a que la pequeña de la casa cumpliese los 18 para no complicar el proceso, y el día ha llegado. Ahora, doña Cristina tendrá que soltarle un buen pastón al que fuera su marido, y este, contento como un niño, ha salido a celebrarlo con sus amigotes del Barça.

Este fin de semana, Iñaki se ha ido de farra con sus compañeros de equipo. Tal y como publica Informalia, Enric Masip, actual asesor del presidente Joan Laporta, dio fe del encuentro que han mantenido este fin de semana en un restaurante de Barcelona para celebrar el setenta cumpleaños del que fuera su entrenador, Valero Rivera.

Y una vez más, Ainhoa Armentia no estaba invitada al evento. El ex duque y su adorada novieta no hacen planes en sociedad, aunque la cosa podría cambiar ahora que el divorcio es definitivo.