Yolanda Rodríguez, la madre de Marina ('La Isla de las Tentaciones'), en el ojo del huracán por la clínica dental que dirige

Cómo es esto de los negocios... Que un día están en todo lo alto, en cada anuncio de cada cadena que ves en televisión, y al día siguiente pueden irse de cabeza y partirse contra el suelo todos los piños. Quizás ahora mismo andes un poco perdido y te pienses que aquí vamos a ponernos a hablar de empresas, quiebras e inversiones. Ni que fuéramos nosotros 'El Economista'.

Venimos a hablar de Yolanda Rodríguez, la madre de Marina (la muchacha de 'La Isla de las Tentaciones'). Y es que esto de estar en el ojo del huracán tiene que ser algo que venga en la genética, en el ADN, porque a su madre, a la Yoli, le pasa otro tanto de lo mismo.

Yolanda está volviendo a ser tendencia... Y esta vez no tiene nada que ver ni con el amor, ni con su hija, ni con el programa. Sino por un asunto de negocios.

Como cuenta la revista 'Diez Minutos', todo el pueblo de Utrera está deseando lanzarse sobre la yugular de la mujer. ¿El motivo? Agárrate que vienen curvas: la Rodríguez es allí directora de una clínica dental de la cadena Dentix que, sin previo aviso, terminó cerrando.

La cadena lleva meses en quiebra y sus clínicas están echando el cierre más rápido que Corporación Dermoestética. ¿Consecuencia? Dejar a cientos de pacientes a mitad de tratamiento, perdiendo el dinero por tratamientos que no se les ha dado o incluso algunos que continúan pagándolos al optar por la financiación (y sabiendo que, obviamente, no se les va a dar).

Y no solo están teniendo problemas con los pacientes, sino también con el dueño del local en el que se encontraba. El propio casero cuenta a la revista cómo el equipo que regentaba la clínica llevaban más de un año sin pagar el alquiler: "Aquí no dijeron nada y nada más que nos dieron largas", explica. "Esto está en manos de un juez, no puedo ni entrar en mi local porque me busco la ruina. El dinero yo lo he perdido, pero quiero recuperar mi local", añade.

Por el momento Yolanda no se ha pronunciado públicamente sobre lo sucedido. Y verás tú la que se puede liar. Que como los vecinos de Utrera acaben hasta el cimborrio... Igual Yolanda es la que se tiene que ir buscando a un dentista. Eso sí, un Dentix no.