Durante todo el mes de febrero, parecía un agujero negro se había tragado a Paz Padilla como si fuera la prota de la versión cañí de 'Stranger Things' tras su sonada discusión con Belén Esteban en el plató de 'Sálvame'. El futuro de la presentadora era toda una incógnita como el saber si Georgina Rodríguez y Cristiano Ronaldo han coincidido más de dos veces en persona o el secreto de la eterna juventud de la reina Isabel II. Sin embargo, este miércoles Telecinco ponía fin a este sinvivir anunciando el despido de la humorista del programa de las frutas.
La excusa para hacerle a Paz un "no queremos volver a vERTE" ha sido el "incumplimiento de su obligación como presentadora" al abandonar el plató del epicentro del salseo por su rifirrafe en directo con la princesa del pueblo. Una explicación que hace aguas ya que, desde tiempos inmemoriales, la bomba de humo es algo de primero de colaborador de 'Sálvame', que siempre busca rentabilizar sus cabreos con un día llegando antes a casa.
Aunque no es ningún secreto que a Paz Padilla le va de maravilla económicamente hablando, este revés ha sido un mazazo laboral muy duro para la presentadora, que siente una gran pena por no haber podido despedirse de su audiencia y está muy decepcionada por el modus operandi que ha seguido la cadena con su despido.
Los ingresos de Paz Padilla
Paz es una mujer renacentista del siglo XXI. Lo mismo te cuenta un chiste que te hace un coaching sobre cómo afrontar una muerte que te hace de epidemióloga en un directo de Instagram.
Una versatilidad que se traduce en billetes, mucho dinerito. Padilla cuenta con un bar en Madrid y un chiringuito en Cádiz, lo que la convierte en una empresaria hostelera, pero también hotelera ya que alquila por 1.000 euros el fin de semana (y 3.000 la semana completa) una masía de 1.700 metros que tiene en propiedad. Ella, muy comprensiva, también plantea la posibilidad de alquilar un apartamento individual contiguo por 290 euros la noche.
Otro de los ingresos económicos de la presentadora ha sido la herencia de su madre, fallecida recientemente. La gaditana vendió la casa de su madre con el fin de poder adquirir su nuevo hogar. Paz ha pagado cerca de un millón de euros por este caprichito con vistas al Atlántico, seis terrazas y seis dormitorios.
La presentadora también recibe un dinerillo por sus participaciones en 'La que se avecina', donde interpreta a La Chusa, y por las ventas de su tienda online 'No Ni Ná' ya que, junto a su hija Anna Ferrer, tomó la decisión de echar el cierre a la tienda física que tenían en Zahara de los Atunes.
La empresaria también sigue vendiendo ejemplares de su exitoso libro 'El humor de mi vida', que le ha permitido llenar salas de teatro con un monólogo inspirado en su best seller. Tras la buena acogida en Madrid, Paz Padilla ahora llega con su obra a Barcelona, donde podría ver menguar las ventas de entradas dado su conflicto con Mediaset España y la falta de exposición mediática con su salida de la televisión.
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