Este Juliándron se presentó anoche en 'Regreso a la última tentación' (todo un detalle, porque nadie se acordaba de él) como el tentador que más cuentas pendientes tiene con Fani. Se ve que el titular, Rubén Sánchez, les ha fallado y han tenido que sacar a Julián Requena del banquillo.
Este psudoviceverso se ha alistado a la jet set del cancaneo mendigante de tramas ya que, en su vídeo de presentación (donde se supone que deben alimentar nuestro hype por el estreno auténtico del reality), lo mejor que ha podido ofrecernos es decir que está calentito porque el voto de Andrea hizo que tuviera que abandonar Villa Montaña en la primera edición antes de haberse bebido el culillo de vodka que quedaba en la botella que compartía con alguno de los "shavales" para pasarlo teta en las fiestas donde el hielo enfría las copas y calienta a los concursantes (excusita para acercar las bocas).
Tras ver en los avances cómo, casi por justicia divina, Fani se hace un sprint por la playa tras la fuga de dignidad de Christofer en la hoguera final (mood: "ahora soy yo el que se va, se va, se va, se va") y las lágrimas de la Carbajo por no haber podido contener lo que sentía ahí abajo, ya se intuía que Estefanía ha vuelto a tropezar dos veces con la misma piedra en la isla que no sólo es un accidente geográfico sino también es un accidente asegurado en las relaciones de los que la pisan.
Según adelantaron varios medios como 'Algo Pasa TV', el motivo de este drama de los que lágrimas derrama no es otro que la segunda infidelidad de Fani a Christofer en el programa. El hombre de rostro triste habría tenido que volver a ver cómo su churri se la pegaba con un tentador mazado con pinta de instalador de Aquaservice, esta vez con Julián.
Sólo hay que ver esta escenita tórrida que la exconcursante de 'Supervivientes' y este mendigo de protagonismo televisivo han protagonizado en la piscina, tal y como se puede ver en las promos tras los dos estrenos fakes de 'La Última (cagada en el amor y nos vamos) Tentación'.
Reconoceríamos esa decoloración del primo cañí de Cruella de Vil a leguas. Una prueba más que evidente de que Christofer tiene motivos para mandar a '¡¡¡Estefaníaaaaaa!!!' a tomar viento. ¿Será letal este regreso a República Dominicana en la relación de estos dos tortolitos nada listos (a quién se le ocurre volver)?
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