Los de 'La Isla de las Filtraciones' firman una cláusula dentro del contrato que les impide revelar y publicar cualquier tipo de foto, comentario o vídeo que dé pistas sobre cómo están sus ajetreadas vidas sentimentales actuales antes del fin de la temporada del programa para así evitar cualquier tipo de spoiler o filtración (un problema que no está ocurriendo, para nada, este año).
Una norma que suelen cumplir a rajatabla, de hecho, se la toman más en serio que las restricciones sanitarias por la covid (incluso) porque, seguramente, en el caso de no hacerlo, serían penalizados con una multa económica. ¿Y cómo la iban a pagar si ya se han gastado todo su sueldo en shishas, fiestas ilegales y comprando seguidores en Instagram?
El exconcursante Álex Bueno, el que ahora enseña su chirimoya en OnlyFans, acudió a 'Sábado Deluxe' para comentar el paso por 'La Isla de las Palpitaciones' de Fiama, su exnovia. Allí, tanto él como alguno de los colaboradores demostraron que esta cláusula debería ser firmada por todo quisqui que pise un plató de la cadena.
Durante la tertulia, el viceverso exhibicionista demostró que la norma de no revelar datos sobre los concursantes le importa lo mismo que la intimidad de sus genitales o quiénes son los Reyes Católicos, ya que Álex desveló (sin querer/queriendo) varios detalles que nos hacen afirmar sin miedo a equivocarnos que lo de Fiama y Manuel está finiquitado, tiene menos futuro y credibilidad que la 'Power Balance'.
La primera en cagarla (porque ya lo hace sistemáticamente en Telecinco) fue la gran Marta López, que quiso hacerse la listilla comunicando que los de la primera edición de 'La Isla de las Palpitaciones' intentaron darse una nueva oportunidad: "Ellos volvieron, hacen dos meses estaban liados Fiama y él", decía la exgran hermana intentado ganarse la aprobación como no periodista de Jorge Javier.
"Hace dos meses estábamos juntos en nuestra casa de Vallecas y me dice la chiquilla que se le ha antojado un McDonald's. Lo pido, me dice que quiere patatas deluxe. Llega el repartidor, abrimos la caja y le habían traído patatas normales. No sabes el cristo que me montó Fiama por unas patatas...", relataba Álex explicando el motivo de peso (y deluxe) por el que dejaron por vigésimo novena vez su relación.
Los colaboradores requerían un poco más de contexto. ¿Pidieron a través de la página web o por 'Glovo'? ¿Llegaron las hamburguesas calientes o venían las patatas más flácidas que la pinga de Rasputín? "Nos vimos en casa de un amigo suyo", explicaba Álex. "¿En Valencia?", preguntaba JorgeJa algo perdido porque, mientras que hablaba, estaba muy ocupado poniéndole ojitos a Tom Brusse.
Es entonces cuando Álex Bueno detonó el máximo spoiler de la noche: "No, de Valencia es el novio que tiene ahora", respondía el exnovio de Fiama, algo incómodo por llevar tanta ropa, haciéndonos saber que la canaria no va a llegar a nada con Manuel, sino que ha comenzado una relación con otro tete.
Porque, a ver, el Manué acento valenciano no tiene... No hace falta ser Cristina Soria para googlear y saber que Manolito el cariñoso (va dando besos por las esquinas) es más gaditano que los carnavales.
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