Diego ha sido el elegido por la Asamblea General de Reyes de la Cornamenta (AGRC), formada por todos los habitantes de Villa Playa, para ver en directo (habrá que creérselo) qué estaba ocurriendo en la casa de sus novias durante 'Diez minutos' (así se van familiarizando con la prensa y las revistas del cancaneo).
Lo que viene siendo un "migar" (cotillear) las historias de Instagram de toda la vida, pero en el reality sin que la App te chive quién las ha visto... ¡Y en una tele! Se acabó el negocio para la óptica a la que iban las parejas después del reality a ponerse gafas tras dos meses forzando la vista para ver cómo les ponían los cuernos en una tablet mini.
Los shavales de esta noshe carricoshes, los 'One Direction' de Matalascañas, los que aprendieron a ser buenos novios viendo 'Hornotube' (a los hechos me remito), creen que Diego es el que más se lo ha ganado o, al menos, el que más beneficio podía sacarle a este privilegio: para ver si le merecía la pena parar el mamoneo con Carla Divinity (su tentadora favorita) o si, por el contrario, podía seguir al libre albedrío jugando con fuego (pasándose hielitos con la boca).
De este modo, Diego ha tenido su trabajo más estable durante diez minutazos en los que ha podido ser el 'Súper' de 'GH VIP: Villa Montaña' . Casualmente, se ha encontrado a una Lola destrozada desahogándose con Lucía sobre lo mucho que quiere a su "ratoncito" (minutos antes de meterse mano en la cama con otro, claro).
Lola estaba haciéndose su propio 'Qué Tiempo Tan Feliz' sin María Teresa Campos repasando su historia de amor con Diego sin dejar de llorar ni un segundo: que si eran ideales, que si es su "ratonín", que si cree que las cosas que le faltaban en su relación se compensaban con otras más bonitas, que si Don Simone era un capricho y prefiere el Bifrutas con leche de Diego...
"Conectábamos tanto, éramos tan iguales en algunas cosas, que era frío, pero cuando me besaba lo hacía de verdad. Me he reído tanto con él", le lloraba Lola a Lucía apelando a la gracia natural y a lo salao que es Diego, que tiene un arte el chaval que no se le puede aguantar (#ModoIroníaON).
A Diego se le ha hecho el corazón pedazos y la picha petisuis al escuchar el arrepentimiento instantáneo de Lola, que le ha durado menos que una insta story, también te digo. "Me he confundido, me he dejado llevar", continuaba insistiendo su novia mientras que la cuenta atrás seguía corriendo.
De hecho, este robot programado para el fornicio, que dice ser boxeador y el Daddy Yankee de 'MyHyV' (su fuerte son los videoclips), ha empezado a presentar algunos rasgos de ser humano al empañar "esos ojillos azules" que tanto extraña su novia. ¡Se ha emocionado! Esto y el 'Si por mí fuera' de Georgina Rodríguez en 'Mask Singer': los momentos más sorprendentes del año.
Y es que Diego ha mostrado una paleta de sentimientos menos variada que la gama cromática del vestuario de Mario Vaquerizo. El chaval cuenta del mismo modo que se ha liado con Carla y lo "dolido" que está porque su novia se acuerda más del perro que de él.
"La veo mal y, aunque suene contradictorio, me alegro porque significa que está arrepentida", ha comenzado diciendo Diego con la misma emoción sentimental con la que iría a una colonoscopia.
Los sentimientos de Diego se han hartado de su propio confinamiento en esa coraza de machito '¡Furboo! ¡Tetas!' y han salido a tomar el aire a través de un maduro ejercicio de autocrítica que le ha hecho entender en qué punto está su relación con Lola y porqué ha perdido amigos, familia e, incluso, a su ex:
"A veces soy muy egoísta con Lola porque ella también me ha visto a mí haciendo algo mal y está pensando en arreglar lo nuestro y yo, durante toda mi vida, he actuado de otra forma. Cuando alguien me hace algo malo, voy yo y lo hago peor. Eso me hace recapacitar", decía Diego con las lágrimas viendo la luz del mundo real por primera vez en el reality.
Sandra Barneda no ha podido dejar de llorar (eso ya no es noticia) al ser testigo ocular de la primera conclusión lógica y coherente del concursante durante su paso en 'La Isla de las Filtraciones'. Lo demás... Bueno, nada que no arregle un arsenal de cuadernillos Rubio (algunos patones mete) y algún que otro curso intensivo online en Mango Man o Trendencias Hombre (la moda tampoco es lo suyo, para qué engañarnos).
"Mi madre también me lo dice, que me muestre más. Yo me tomo la vida como si fuera una selva, que para sobrevivir hay que ser fuerte y duro. Con Lola llevo mucho tiempo y me va a costar perdonarla y asimilarlo, pero me gusta verla así", ha continuado James Lover con su coaching personal a sí mismo.
A pesar de haberse centrado en el discursito emocional 'PauloCohelista' y Mr.Wonderfulista de su novia, Diego ha hecho muy bien su función de 'Ojo que todo lo ve' y no ha perdido detalle de todo lo que ocurría en la casa al mismo tiempo. De hecho, en una de las ventanitas, ha visto el capítulo del Apocalipsis para Jesucristo Surferstar. Haz click aquí para descubrir lo ocurrido.
Vía | MitelePlus
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