Lo que por desgracia les suele pasar a algunos famosos cuando alcanzan el estrellato es que se creen que son los másters del universo. Que el mundo gira en torno a su ombligo. Y para muestra, un botón. Rihanna está un pelín desconectada de la realidad, eso lo vemos sólo con fijarnos en su vida amorosa, pero una cosa es que se lleve al catre a un fulano de la catadura moral de Chris Brown y otra muy distinta que haga esperar cuatro horas a los chavales de un instituto donde tenía un concierto benéfico fijado.
Nada menos que 2.500 estudiantes esperaron durante cuatro horas en el gimnasio de su instituto en Chicago, que había ganado una competición para lograr que Rihanna acudiera a cantarles unos temillas. La aparición estaba fijada para la una de la tarde, pero la diva no tuvo a bien aparecer hasta las cinco, con el consiguiente rebote de los profesores, que decían, y con razón, que una cosa es llegar elegantemente tarde y otra ésta, que es directamente grosería pura y dura.
Los chavales se volvieron locos cuando entró Rihanna, como si no hubiera pasado nada. Ella twitteó que había habido un problema con el tráfico, pero permitidme que no me crea que tardes casi cinco horas desde que sales de tu hotel hasta que llegas al instituto, a menos que directamente hayas planeado mal el viaje. En su descargo está el hecho de que luego enviara entradas a los críos para el concierto de su gira que dará en uno de los recintos de la ciudad.
Vía | Digital Spy Foto | Facebook oficial de Rihanna En Poprosa | Rihanna mandará a la porra a Chris Brown si vuelve a pasarse: ¿no te lo crees ni tú? En Poprosa | Por si no queríais portadas de Rihanna en Elle... ahí van cuatro
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