Un dramita y de los chungos ha acechado este finde a a la parejita más top del famoseo hollywoodense. La churri de Justin Bieber, Hailey Baldwin, sufrió el pasado jueves un ictus cuando se encontraba en su casoplón con el artista de bigotillo incipiente. No ha sido hasta hace escasas horas cuando la queen lo ha compartido a su ejercito de seguidores: "El jueves por la mañana estaba sentada desayunando con mi marido cuando empecé a tener síntomas similares a los de un derrame cerebral y me llevaron al hospital", ha comenzado a decir a través de unos stories.
Fue en el hospital donde le dieron la fatídica noticia de que había sufrido un ictus: "Descubrieron que había sufrido un coágulo de sangre pequeño en mi cerebro, lo que provocó una breve falta de oxígeno", ha expresado la modelo, provocando el ataquito de ansiedad de sus fans que relacionaron su ausencia en redes con un viajecito deluxe o una escapada romanticona de las que suelen hacer los tortolitos.
Eso sí, el body de la señora esposa del cantante lo venció por sí mismo y volvió a estar on fire en poco tiempo: "Mi cuerpo lo había superado por sí solo y me recuperé por completo en unas pocas horas. Estoy muy agradecida con todos los médicos increíbles y enfermeras que me han cuidado".
La fashion victim solo tiene palabras de agradecimiento para sus followers que han estado al pie del cañón preocupándose por el estado de salud de su ídola: "Gracias a todos los que se han acercado con buenos deseos y preocupación, y por todo el apoyo y el amor", ha sentenciado la empresaria. Nosotros ansiamos muchísimo que Baldwain vuelva a estar al 100% más pronto que tarde y nos deleite con sus apariciones estelares con Bieber en las que el amor, las miraditas cómplices y las gorras de quinceañero pandillero (de él) acaparan todos los flashes.
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