Malas noticias, otra vez. Amy Winehouse ha tenido que ser hospitalizada el pasado fin de semana en la isla caribeña de la que ya forma parte cual aborigen más. Al parecer a la cantante, según dicen (luego allá cada uno lo que piense), se le había terminado un medicamento que está tomando y se puso malísima.
Los testigos aseguran que llegó convulsionada y temblaba muchísimo, había sufrido un colapso. Por ello no quedó más remedio que ingresarla y mantenerla en observación. Eso sí, como aquí el que no corre vuela y ante la posibilidad que había de que se comenzase a especular sobre tema drogas y demás, el representante de Wino ha declarado que no tiene nada que ver con las adicciones. Pero claro, otras fuentes presentes dicen que había estado bebiendo (bastante), cosa que ya hemos visto que practica en la isla con asiduidad así como que sigue fumando marihuana.
El caso es que parece que ya ha salido y que está bien o, al menos, todo lo bien que cabría esperar. Seguiremos atentos a todo lo que pueda traer esta nueva “reacción”.
Vía | MTV