Y yo me pregunto con cara de circunstancia y ceño fruncido... ¿Habrá alguna vez en que Miranda Kerr se apiade del resto de los mortales y decida aparecer en público con una mala cara, una arruga de más, un mal maquillaje o una mala pose? Porque mira que nos afanamos por intentar pillarla en el peor de sus momentos pero es que no hay forma. Antes solía pensar que la muchacha se cuidaba muy mucho de no aparecer mal en público pero ahora me planteo... ¿no será que no hay manera de pillarla fea porque es que ni queriendo lo consigue?
Y claro, de ser así, esto es un filón para todas las empresas de moda que han visto en ella como la fuente de la eterna juventud. Invertir en Miranda Kerr implica invertir en millones y millones de ganancias así como quien no quiere la cosa. Los de Bally han sido uno de ellos que, definitivamente, han querido que sea la imagen de su nueva campaña para la temporada Primavera-Verano 2012 y como siempre, la nena sale deslumbrante.
Comparte cartel con Julia Stegner, Cedric Bihr y Robert Konjic pero sinceramente a su lado, no hay quien le eclipse. Si ya lo avisó ella, que después de tener al pequeño Flynn solo iba a necesitar unos cuantos meses para reponerse y cargar las pilas. La antesala fue el desfile de Victoria's Secret, donde dejó bastante patente que ella es a la estrías lo que el aceite al agua. Y ahora viene la época álgida de la moza, que es igual que la anterior pero con los beneficios que le ha reportado quedarse encinta entre los que se destacan, la delantera tan protuberante y exuberante que ahora nos gasta. Así da gusto vivir la navidad.
Vía y Foto | Bally