Oh my god... Lo de Miranda Kerr no me digáis que no es para ponerla en un altar porque después del parto y (según ella, que habrá que ver si es cierto o no) por medios totalmente naturales y orgánicos, haya recuperado la figura de una manera tan espectacular y perfecta que cualquiera diría que es madre ¿verdad? Eso es lo que pensaron todos los asistentes al desfile de David Jones en Sidney de la cual Miranda Kerr es imagen, que cuando le vieron enfundada en semejante bikini, a más de uno se le escapó un:
¡Pero si está mejor que antes de dar a luz!
Y les comprendo porque es lo mismo que pensé yo cuando la vi desfilar por la pasarela. No sé si os acordáis que en su momento ella dijo que se había propuesto volver a las pasarelas renovada, con las pilas puestas y dispuesta a dar leña pero claro... no me imaginaba que iba a tener una recuperación tan espectacular y que los bikinis le volverían a sentar igual que antes o incluso mejor. Eso sí, reconozco desde ya mismo que lo que le tengo es una envidia de la sana que no me cabe en el cuerpo porque ojalá todo el mundo pudiera conseguir (o tuviese dinero para hacerlo) el tipazo que ella tiene.
Foto | David Jones