De verdad que no sé si empezar por las mejor o las peor vestidas del evento. Porque manda narices que un acto como los premios CFDA 2011, en los que en teoría se elige icono del año a una celebrity y premian la capacidad creativa de los diseñadores y el estilismo y elegancia de las famosas, algunas acudan al evento con semejante guisa que uno no sabe muy bien si está en Nueva York en los premios Council of Fashion Designers of America o en río de Janeiro en plenos carnavales. En fin, como siempre tenemos algunas excepciones que nuestros compañeros de Trendencias ya han puesto de manifiesto, y que confirman mi teoría de que las que tienen estilo lo tienen siempre y el resto acierta según esté el tiempo (para muchas ayer diluviaba…)
Naomi Watts de Calvin Klein Collection. Sencilla, discreta, brillante… como ella, vamos. Un vestido que le hacía honores a cada uno de los recovecos de su cuerpo y sin duda fue una de las que más miradas robó de los asistentes.
Alessandra Ambrosio y Doutzen Kroes que iban de rojo que te lo cojo, cada una con su Prabal Gurung dando envidia al mundo entero con ese cuerpo que Dios les ha dado.
Liya Kebede escogió un vestido blanco de Derek Lam y Chanel Iman optó por un color turquesa de BCBG Max Azria y si las ponemos a las dos junto con Alessandra nos encontramos con un trío muy colorido y superfavorecido que cada vez que se juntaban para hacer la foto parecía que estaban patrocinando alguna marca de dentífrico al estar así tan bien combinadas sin haber planeado… que casual que son.
Karolina Kurkova… el claro ejemplo de que quien no arriesga no gana. Porque o te ganas un aplauso o te ganas una yoya y en este caso la checa se ganó un merecidísimo aplauso por su mono verde de Diane Von Furstenberg con capucha incluida y sin mangas. Elegante, sofisticada y lo más importante, que iba guapa e iba diferente, dos términos que muchas están convencidas que es imposible que vayan juntos de la mano.
Y señores, se acabó lo bueno. A partir de aquí vamos decrechendo aunque no llegamos a tocar fondo con los estilismos. Kirsten Dunst con un estilo muy masculino de Patrick Ervell pero lo de la coleta no me termina a mi de convencer, que me recuerda demasiado a la que se planta Meredith Grey cuando conoce a la madre del doctor Derek Shepherd en Anatomía de Grey.
Miranda Kerr… iba de Lara Croft en Tomb Raider y ni ella misma lo sabía. Me parece perfecto que quieras dejar al mundo entero ojiplático con lo bien que llevas eso del post-embarazo pero de ahí a que te marques un modelito que parece sacado de un videojuego… solo te faltaban las magnum en las caderas y a matar piojos se ha dicho.
Liv Tyler, Ashley Green y Whitney Port... no iban feas pero tampoco iban tú que digas: madre del amor hermoso. Normalitas, corrientonas… no creo que se merezcan estar en la lista de las mejor vestidas, sinceramente.
Igual me pasa con Lucy Liu... vestido de corte princesa de Monique Lhuillier pero creo que algo inapropiado para lo que por allí se vio desfilar porque no son los Óscar, evento en el que este tipo de vestidos no desentonan con el resto. En fin, que uno ajustadito color lila o negro le hubiera favorecido mucho más.
Con Chloë Sevigny a mí me entra la risa, que creo que le han colocado una mierda debajo de la nariz sin que ella se de cuenta y estuvo toda la noche con esa expresión en la cara de: ¿Pero vosotros no oléis raro por aquí? Mira que cuando yo cuezo la coliflor me queda un olor en casa parecido…
A las gemelas Olsen ya las vamos a echar de comer aparte para que no nos alboroten al gallinero. Innovadoras y trasgresoras, todo lo que tú quieras, pero creo que últimamente se pasan tres pueblos con los estiilismos y se echan de manera gratuita 20 años a las espaldas cada vez que deciden “ponerser guapas”. Blazer de Chanel en color dorado combinado con un vestido de cola negro de The Row y Ashley Olsen prefirió no arriesgar tanto y escogió un vestido de su propia firma, The Row.
Y por supuesto que hubo hombres, un galardonadísimo Marc Jacobs con un traje y pajarita de su propia colección que posó junto con Sofia Coppola la mar de sonriente… ¿le habría contado Marc un chiste y todavía no lo había pillado?
Y para rematar el look de Lady Gaga, que por ser tan suyo, tan despampanante y tan estrambótico, le vamos a dedicar un post para ella sola, que en el fondo es lo que quería.
En Trendencias | El estilo llegó a los premios CFDA 2011: famosas, modelos y diseñadores deslumbran
Fotos | Gtres