Mientras de todo se está diciendo estos días de la paternidad sorpresa, cual regalo de huevo Kinder, de Cristiano Ronaldo, él intenta pasar seguir pasando unos días de relax por Nueva York en compañía de su novia Irina Shayk. El caso es que ahora no vengo a seguir dándole vueltas que si al vientre de alquiler, la pedicura de los horrores, o similar, ahora C-Ron no es el protagonista sino ella, ¡novedad!
Sí, desde que saltó su relación con el astro del fútbol su popularidad ha subido como la espuma y no sólo por todo lo que se ha dicho de que si estaba desolada y con el corazón en un puño por por no saber nada de la paternidad de su novio (cosa que parece que ahora se ha desmentido). Vamos de ser una modelo de lencería más como hay tantas, ha pasado a ser una cara casi habitual en todas las páginas de faranduleo, lo que no es para menos. Eso sí, como no podía ser de otra forma, hay que sacarle tajada a todo lo que haga falta y hay que promocionarse, no sea que el chiquillo se canse de ella y la deje con una mano por delante y otra por detrás.
Ya sabemos que todas las novias de Cristiano se han dejado caer por las revistas mostrando encantos, claro que ninguna de las que ha tenido hasta ahora tenía el caché que supuestamente tiene Irina y en lugar de dejarse caer mostrando pechamen por Interviú, la vemos en GQ. Eso sí, bien ligerita de ropa, pero con un topless mucho menos explícito de lo que nos tienen acostumbrados sus WAGs... Eso sí, yo diría que tiempo al tiempo, que no ha hecho más que empezar.
La verdad es que es la más mona de todas las novias que le hemos conocido, al menos no es una choni de cuidado, ahora ya que le dure o no ya es otro cantar. Sinceramente les doy este verano para que cuando empiece de nuevo la temporada le dé carpetazo, o sino ya lo veremos.
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