También es que algunos tienen unas ideas de bombero a veces que demasiado poco les pasa, para qué nos vamos a engañar. Por ejemplo, si ves a un mono con un machete, ¿a que no te quedas a ver si te arrea con él de canto? No, sales corriendo. Pues algo parecido va a haber que hacer cuando atisbemos a Ke$ha en el horizonte.
En lugar de limitarse a hacer como que cantar, Ke$ha se levantó un día por la mañana y se dijo: "Eh, ¿por qué no intento tatuar a un coleguilla a ver qué tal se me da el asunto?" Algo que a cualquiera le parecería una soberana... ehm... metedura de pata, a ella le pareció chachi piruli.
Así que ni corta ni perezosa se hizo con un conejillo de indias, Andrew W.K., y se puso manos a la obra. Imaginad la escabechina que le hizo que el hombre terminó en el médico con una infección del carajo. Por supuesto, ella se ha lavado las manos - no sabemos si antes o después - del asunto, diciendo que los instrumentos eran de él. ¡Pero bueno! Digo yo, que si eres tú la que le tatúa, te tendrás que encargar de que esté todo bien, animalico... Si es que a veces el sentido común brilla por su ausencia.
Foto | Kesha Time Vía | Starpulse