Poproseros, lo del nuevo rollo de Jennifer Lopez va a dar más que hablar de lo que pensábamos. Y es que sus ventajas debe de tener lo de salir con un pipiolo de veintitantos que encima es bailarín. Vamos, que la latina con el pandero más cotizado del mercado le está sacando partido con ganas a esto de estar solterita.
Al final va a terminar siendo verdad lo que se rumoreaba de que le gustaba menear la pelvis más que a Elvis, porque después de la gala de los American Music Awards hubo uno de esos fiestorros que tanto les gustan a nuestras celebrities y donde se desmadran lejos de los flashes de los paparazzi.
Y como no podía ser de otra forma, JLo acudió al sarao muy acompañadita por Casper Smart. Debía de apretar el calentón, porque al poco de llegar enganchó por banda al susodicho y se lo llevó a un reservado, donde suponemos que hicieron todo tipo de cosas cochinas. Porque nadie se mete a una cabina de esas a cambiar cromos de Panini, digo yo.
Después de darse un palitroque como Dios manda, la Jenni from the block sacó a pasear a su chico entre el famoseo allí congregado y se dedicó a bailar como una descosida el resto de la noche. Sí, hubo baile de refrote a saco con Casper, hasta el punto de que a las 00.45 la pareja salió por patas, más calientes que el bogavante del arroz.
Así que parece que ya tenemos ganador de entre la larga lista de macizos con los que se ha relacionado últimamente a Jennifer Lopez. Con lo buenérrimo que está Rodrigo Santoro... Meh.
Vía | US Magazine Foto | Facebook oficial de los AMA