Mientras la mayoría de nosotros nos tostamos bajo un sol de justicia mientras trabajamos o nos quedamos tirados en el sofá de casa como peces fuera del agua, Heidi Klum está pegándose unas vacaciones de aúpa y remojándose en playas paradisíacas mientras se tuesta al sol. Tanto, tanto se ha tostado que, ni corta ni perezosa, ha querido enseñarnos la diferencia entre la piel quemada y la que no ha visto la luz. ¡La de su culo!
Para subirnos aún más la temperatura y hacernos sudar la gota más gorda posible, Heidi ha querido enseñarnos las consecuencias de tomar el sol a lo bruto, y ha subido a su Instagram una foto de su pandero para que veamos cómo se ha churruscado la pobre. Porque eso es en lo único que tenéis que fijaros, ¿eh? ¡Nada de refocilaros en esas curvas hipnóticas!
Aquí la tenemos, con sus cuarenta años y con un pandero que ya querrían muchas de veinte. Eso sí, seguro que no le faltan voluntarios para darle unas buenas friegas de after-sun, aloe vera o lo que haga falta. Si es que esta mujer sabe ponernos los dientes largos cosa mala.
Vía | E! Online Fotos | Instagram oficial de Heidi Klum En Poprosa | Heidi Klum no quiere ver a Seal ni en pintura... ¡ni en tinta! En Poprosa | Si estás de cumple, llama a Heidi Klum y te monta una fiesta temática en nada
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