Sin duda si alguien se llevó el todo protagonismo de la noche en la gala de Premios de los 40 Principales fue Sara Carbonero. Y no porque fuese la primera vez que acudía un evento con su nueva pechonalidad, no porque se dejara ver con su (mi) Iker Casillas, sino porque fue objeto de una coña de esas con las que sólo puedes decir “tierra trágame”, o sino ahí tenéis su cara.
Y es que Sara Carbonero fue la encargada de entregar el premio Shakira (que no estuvo de cuerpo presente) como Mejor Artista. El caso es que compartió escenario con José Ramón de la Morena que no perdió la oportunidad de soltarle la pullita por excelencia al decir…
Y el ganador es… ¡Íker Casillas!
Me meo de la risa del careto que se le quedó a la muchacha en plan no sé si sacarte los ojos con cucharillas de helado o reírte la gracia. Desde luego ni una cosa ni la otra, porque Sarita puso cara de póker y pasó olímpicamente del tema porque yo aquí he venido a hablar de mi libro… o a lo que sea. Así que ya sabéis a la presentadora no le toquéis la moral si no queréis que os fulmine con la mirada. Nena, hay que ver qué mala leche tenemos cuando nos pillan en un renuncio…
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