Parece que la pobre Lily Allen no levanta cabeza. Después de perder el bebé que tan ilusionada iba a tener con Ed Simons, ahora él la ha dejado.
O eso dicen algunas fuentes, porque otras mantienen que ha sido ella la que ha puesto punto final a una relación que parecía ir por buen puerto a pesar de las dificultades.
Parece que la ruptura no ha sentado muy bien a Lily de todos modos, porque fue descubierta borracha el pasado 14 de febrero, y bien pasadita, tras una jornada llena de aventuras, empezando por el show de Luella Parsons y el de Vivienne Westwood, en compañía de Kelly Osbourne. Dios las cría...
Vía | DListed, La Voz Digital