Así como suena. La modelo Kate Moss se ha encaprichado de un "black cub", o lo que es lo mismo, un típico taxi negro que circula por Londres. Le ha costado un riñón, eso sí, nada menos que unos 44.450 euros por un mastodonte de coche, pero ella, fiel a su convicción ya lo conduce.
Según informa el 'Mail on Sunday' la semana pasada Kate llevó a sus amigos a casa desde un pub conduciendo ella misma el taxi. Al parecer es que se ha puesto de moda, ya que hay más famosos que lo han comprado. Incluso el forzudo Arnold Schwarzenegger se lo llevó en barco hasta su California.
La principal ventaja de estos coches es que proporciona discreción para los famosos, son bastante anónimos (si conduces por Londres) además de que no pagas en los aparcamientos. Eso sí, Kate tendrá que circular por el mismo carril que el resto de los mortales. El carril de taxis no vale, guapa. Y es que ya no saben que hacer para pasar desapercibidos, aunque luego bien que la montan. Y Kate es una de ellas. Cosas de famosos.
Vía | El País