Nuestra pobre Demi Moore, hay que ver lo mal que lo está pasando con eso de la ruptura. Mira que yo no quería creermelo cuando las malas lenguas me dijeron que igual le estaba dando a los psicotrópicos para poder salir al paso con toda la presión mediática que se estaba originando con su ruptura, los cuernos, las infidelidades... que yo le había dado un voto de confianza a la Moore y al parecer me he equivocado: está mal y no os podéis imaginar hasta que punto.
Vamos, que le ha tocado ceder y agachar la cabeza porque cuando vino la ambulancia a su casa por un supuesto malestar que había tenido, le aconsejaron fervientemente que acudiera a un centro de rehabilitación para superar los problemas de salud que arrastra desde que anunciara su separación de Ashton Kutcher. Y ella se negaba diciendo que solo se había pasado con las aspirinas, que todo estaba bajo control... pero resultó que no, que había algo más en la copa Demi.
La buena noticia es que ahora mismo la moza se encuentra recibiendo terapia en el mismo centro de Utah en el que fueron tratadas otras tantas como Lindsay Lohan o Eva Mendes así que imagino que saben lo que se traen entre manos con casos como este y que su ex marido, Bruce Willis y las 3 hijas que tuvieron en común han sido los que han conseguido que Demi Moore se decidiera a dar el paso de ingresar en el centro de rehabilitación, cosa que me agrada bastante pues demuestra que a pesar de la distancia y los malos rollos, en el fondo están ahí pase lo que pase.
Foto | Demi Moore en Facebook Vía | Reuters En Poprosa | Demi Moore, ponte buena, "mi arma" En Poprosa | Espérate que creo que el show Demi Moore-Ashton Kutcher todavía no ha acabado...