Nicole Kidman ha hecho pública una noticia sobrecogedora, en una entrevista a "Vanity Fair", que ha llamado profundamente la atención de medio mundo: la actriz perdió un bebé que esperaba cuando estuvo casada con Tom Cruise.
La pareja vivió momentos duros y llegó a ser un trance importante en sus vidas, ya que hubiese sido el primer hijo de ambos. Dado el hermetismo con el que guarda su vida privada, el hecho de que la actriz confesase este asunto ha sorprendido a propios y extraños.
La verdad es que tampoco ha aportado más información al respecto, quizás para evitar las consecuencias escabrosas que pudieran derivarse, dado que podría tratarse de verdadera carnaza para la prensa amarilla. En tono enigmático ha confesado también que "tal vez un día se sabrá la historia", al respecto de sus diez años de matrimonio que acabaron súbitamente en divorcio inesperado.
Vía | Cuore