Ayer en Hollywood no ganaron para disgustos (y no fue por la inoperancia del Fantastic Team en Santander), al intento de suicidio de Owen Wilson (¡animo chaval!) hay que añadir el accidente de tráfico que sufrió Nick Bollea, hijo de uno de nuestros grandes ídolos de juventud: Hulk Hogan.
El Toyota Supra amarillo del hijo del luchador se estampó contra una palmera en la localidad de Clearwater (Florida) quedando en el estado que demuestra la imagen que acompaña el post. Nick iba acompañado por un amigo. Los dos fueron trasladados con serias heridas en un helicoptero a un hospital cercano. Desde poprosa deseamos a los dos chavales una pronta recuperación a los dos chavales... y que Nick Bollea sea más cuidadoso en su conducción a partir de ahora.
Vía y foto | celebslam