Irina Shayk o cómo pasar de plantar tomates a enseñar cacho sin piedad

Lo de Irina Shayk a veces roza los límites de lo que estamos dispuestas a soportar muchas féminas, poproseros. De verdad, qué manera de enseñar cacho día sí día también es ésta, sin piedad alguna para las que vivimos a dieta permanente. Esta semana ha sido protagonista de nuevo porque menudas fotitos de sus reportajes nos comparte por redes sociales, ¡tonta no es!

Irina Shayk sabe que su tipazo mueve mares y montañas y no para de sacarle partido, aunque sea siempre con la misma pose y enseñando carne sin parar. Lo último es para la revista Vman como imagen de la promoción de su décimo aniversario y en medio de estas fotos que ya han dado la vuelta al planeta y han batido récords de 'likes', nos encontramos con declaraciones la mar de campechanas:

Crecí en Yemanzhelinsk, que es un pequeño pueblo en el medio de la nada. Es muy sencillo y tranquilo. Yo tenía un jardín, y después de la escuela me iba plantar patatas y tomates

Recuerdo que cuando tenía 14 años quería unas botas de tacón alto, pero costaban 25 dólares, no podía pagarlos. Así que trabajé en un hospital durante 20 días pintando las paredes del mismo para ganarme esos 25 dólares. Me acuerdo de que los otros niños se burlaban de mí por eso: '¿Quién esta rara y flaca que lleva botas de tacón alto?' No me importaba

De verdad, que aunque no lo pongamos en duda, una no puede imaginarte plantando tomates y patatas con esa foto del tanga blanco de cabecera, querida. Si es que no nos queda otra que asociarte a lo de salir de espaldas, enseñando cacha y culo y poniendo morritos. Eso sí, ¡estás que te sales!

Vía | vanitatis y europapress Fotos | instagram Irina Shayk En Poprosa | Pero qué monos Irina Shayk y Cristiano modo cocinillas ON En Poprosa | Cómo se nos vuelve a poner de sexy Irina Shayk