Pues vaya manera de comenzar la semana… si ya estaba desanimado por no encontrar el trocito de diente de ajo que me había caído en la cocina mientras preparaba el sofrito, ahora resulta que probablemente no se emita uno de los programas más ñoños y ridículos de la historia de la televisión. ¡Es que no hay derecho!
Noches y noches sin dormir, esperando a que por fin llegue el día en que un grupo de ilusionados personajes estéticamente entrenados para deslumbrar a la cámara, desfilen ante los dos millones y poco pico de espectadores que se preveían después de la caída en picado de la audiencia de las últimas ediciones.
Panorama de cambios se vislumbra sobre el show, y más vale que sean para bien. Por el momento parece que pretenden enviar el programa a Punta Cana, y cuando apriete un poco más el calorcito. ¿Qué? ¿asombrados por la enorme renovación de contenidos, eh? ¡Pero que originalidad!
En ocasiones veo creativos de telecinco en mis pesadillas, ideando el programa definitivo: el NO-DO en color presentado por María Eugenia Yagüe...
En fin, no pierdan las esperanzas señoras, quién sabe si tendremos ofertas de otras cadenas para renovar el típico correo spam criticando las fotos de los candidatos y candidatas más esperpénticas, que tan buenos ratos nos han hecho pasar al menos…