Debe ser como una epidemia o un virus o algo así porque no hay estrella de la música a la que no le entren ganas de serlo del cine. Normalmente, salvo honrosas excepciones, los resultados son horribles. Una de las que más ha intentado convertirse en actriz de éxito ha sido Madonna. Pues bien, Marta Sánchez, que siempre ha querido ser como Madonna, siguió sus pasos y debutó en el cine con una caspa infumable llamada Supernova y que resultó ser un agujero negro más que una supernova propiamente dicha. Afortunadamente, Martita se dió cuenta de que eso no era lo suyo de esta peli y no reincidió en su delirio como sigue haciendo todavía a día de hoy La Ambición Rubia.
Si tienes valor para descubrir el oscuro y casposo pasado de Marta Sánchez, te dejo un vídeo con los mejores momentos de esa pseudo-peli (que hace buenas las de Uwe Boll) después del corte.
Aunque ahora que lo pienso, el pasado de Marta Sánchez era oscuro pero el presente no es que sea brillante precisamente con su lamentable espectáculo dando el pregón del EuroPride y el desvergonzado aprovechamiento de un tema de Depeche Mode en el primer single de su nuevo disco.
Foto | Revista Elle