Por mucho síndrome de 'Peter Pan' que tenga Kiko Matamoros a sus 65 años, el colaborador de 'Sálvame' (omnipresente en todos los programas de Telecinco) a veces disfruta del gozo de algunas ventajas de su edad, como la inmensa alegría que recorre ese cuerpo considerado por el Ayuntamiento como "rocódromo municipal" cada vez que se convierte en abuelo. Su hija Laura Matamoros le ha hecho el regalo más impresionante por su cumpleaños este 27 de diciembre: ha dado a luz a su segundo hijo con el cocinero Benji Aparicio.
A eso de las 16:00 horas aproximadamente, Laura anunciaba a sus followers en su perfil de Instagram que estaba a punto de realizar uno de los unboxings más relevantes de su vida como influencer. "Ha llegado el día, 3,5 cm. Deseadnos suerte", escribía junto a una historia en la que aparecía tumbada en la camilla del hospital, con los dedos cruzados y luciendo pijama hospitalario a lo Belén Esteban en la edición de 'GH VIP' que precedió a la que ella misma ganó. La hija de Matamoros no ha vuelto a coger el móvil desde entonces. Vamos, que ha tenido un parto y un détox de redes sociales: un dos en uno.
Laura ha dado a luz a su segundo hijo, que ha recibido el mismo nombre que su padre (Benji), quizás como símbolo de lo clave que ha sido para recuperar la relación con el cocinero cuando su noviazgo parecía más muerto que la expresión facial de su padre Kiko. El colaborador, que siente debilidad por su primer y único nieto hasta la fecha, Matías (de 3 años), expresó su alegría junto al resto de compañeros de 'Sálvame': “He hablado con mi hija. He visto a mi nieto, que es igual que su hermano y estoy feliz”, decía visiblemente emocionado y con lágrimas en los ojos.
“La verdad es que estoy feliz, ha sido un regalado, yo quería que naciera el mismo día que yo. He visto a mi hija feliz, al padre, al niño y estas cosas la verdad es que merece la pena estar aquí aunque sea un rato por tener esas emociones", compartía en el programa de las frutas (que Benji Jr va a tener que tomar en forma de potito hasta que le salgan los dientes) asegurando que el parto ha sido “perfecto, sin dolores y sin muchas molestias”, en consonancia con el embarazo tan tranquilo que ha vivido estos meses su hija Laura, mucho "más rápido y menos pesado que la otra vez”, según ha contado el abuelo de la criaturita.
Marta López Álamo, la más próxima en edad al bebé de la familia después del hermano del recién llegado, de momento no muestra síntomas del típico recelo que sienten los niños ante el nacimiento de un nuevo miembro: "Me ha llamado Kiko y estaba llorando y no sabéis la alegría que me da. Me ha dicho que es igual que Mati. Es tan feliz con sus nietos… Soy tan feliz por Laura, por Benji, qué alegría, me encanta", compartía la influencer en sus redes sociales mostrando una aparente alegría por su condición de abuelastra por segunda vez.
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