Acaba de estrenar "El club de los suicidas", una comedia con un toque de cine negro en la que da vida a un hombre dispuesto a quitarse la vida porque le ha dejado su pareja. Según él, en declaraciones a la revista Pronto, no le ha sido difícil meterse en el papel, puesto que se confiesa depresivo, frágil y con experiencia en esto de las rupturas:
Yo soy de los que sufren mucho por desamor, y en esta película un poco desnudo mi alma.
Aunque dice que no cierra las puertas al amor, confiesa que su única pareja actualmente es su perro Nico, un precioso Westie que le acompaña a todas partes. Durante el rodaje de "El penalti más largo del mundo" rompió con su pareja y lo pasó tan mal que no ha tenido fuerzas para volverlo a intentar.
En septiembre, Fernando comenzará el rodaje de una serie para Cuatro llamada Gominolas, sobre las peripecias de un grupo de músicos.