Lo que faltaba, esto ya es el repelús total. Si no teníamos suficiente con las muestras de cariño ante la prensa y que se presenten como la pareja más feliz del universo, cosa que está bien pero todo en su justa medida, ahora resulta que Elsa Pataky y Adrien Brody son muy empalagosos incluso con gente delante.
Prueba de ello fue en la fiesta que se celebró después de la presentació en Nueva York de “Cadillac Records”, la última pelícual de Adrien y de cuyo estreno ya hablamos. El caso es que en esa fiesta lo de el actor y la española debió ser algo tremendo. Se pasaron todo el rato dándose besos y cuando pararon en algún momento fue para susurrarse cosas al oído, para cuchichear o dedicarse piropos. Vamos que no son aptos para diabéticos. De hecho se estuvieron apartados del resto de invitados, en una zona más reservada (será que no tienen castillo grande para quererse…), donde Elsa estuvo todo el tiempo sentada encima de las rodillas de su querido, vamos que no quedó paralítico de milagro, porque se le tuvieron que dormir las piernas cosa mala. Algunos de los presentes inlcuso dijeron que la Pataky se sentía lo más por estar con la estrella de la fiesta. Buah, si que empieza con buen pie, vaya hachazo por parte del personal…
Chicos, deberíais reservaros que luego en la intimidad no rendís igual.
Vía | OK!