Corría el año 2009 cuando las puertas de la casa de 'Gran Hermano' se abrieron para recibir a la todoterreno de Tatiana Malyshkina. Su edición, la 11º para ser exactos, estuvo marcada por las grescas, los edredonings al por mayor de Arturo Requejo e Indhira Kalvani y el grito desmesurado de la rusa que invitaba educadamente a todo ser viviente que le llevara la contraria a que le "comiera to' el c***". Vaya, que la chiquilla manejaba nuestra lengua a las mil maravillas.
Una vez que picó billete del casoplón de 'GH', la joven deslenguada de 19 años no volvió a lucir palmito por ningún programa de televisión. Ahora, tiene 32 tacos y sigue viviendo en Roquetas de Mar (Almería), pero los acontecimientos que ha protagonizado en la última década le dan para tener su propia docuserie cual Rociíto de España.
Fue en el 2015 cuando Tatiana se enamoró perdidamente de un chico ruso con el que se casó al poco tiempo. Ambos regresaron a Rusia, pero a los 3 años, el amor se fue por la ventana. En 2019, Malyshkina retornó a Almería e hizo público su divorcio. De hecho, en unas declaraciones recogidas por 'Telecinco', la propia Tatiana confesó que había denunciado al que fuera su marido por malos tratos.
Por lo que le hemos cotilleado a Tatiana desde sus respectivas cuentas tanto de Instagram como de TikTok, ella vive la mar de feliz en compañía de su mami, hermana y sobrina, y en los últimos años ha trabajado en una empresa mayorista de frutas y hortalizas, además de en un bar de copas.
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