Efectivamente, cuando me refiero a como los conejos me refiero a que están que no paran en la cama. Todo el día, siempre y cuando tengan tiempo disponible, como los conejos. Pero tranquilos, que no es que alguno de los dos se haya vuelto un ninfómano o que les sobre el tiempo y prefieran pasarlo debajo de las sábanas. Nada de eso. Lo que ocurre es que después de tres hijos varones, Victoria y David Beckham está deseando tener una niña (Creo que más Victoria que David...)
Y al parecer Victoria Beckham cuando se lo propone es toda una leona en la cama. Bueno, tanto será que David Beckham ha confesado que está agotado del intenso planing que su mujer le ha hecho para poder concebir en los días más fértiles y conseguir una niña. Vamos, que el pobre hombre lesionado, llega de rehabilitación y le toca jugar su partido más difícil entre la almohada y un par de sábanas.
Al parecer, según unas declaraciones que si hicieron a un periódico británico:
David está aliviado de tener un descanso. No es que se queje, pero bastante tiene con todas las vendas del pie como para que le pidan hacer gimnasia en el dormitorio cinco veces al día. Lo que David dice básicamente es que tiene que estar permanentemente disponible. Está agotado y sólo intenta recuperar la energía para estar preparado cuando vuelva Victoria.
No sé a vosotros, pero a mi el hecho de imaginarme a Victoria Beckham, tumbada en la cama con su camisón, mirando al pobre Beckham con una sonrisa desencajada en la cara y temiéndose lo peor, y ella en plan:
Ven aquí mi hombre, que tú me has enseñado a ser una leona
Hace que se me suba todo menos la líbido. Pobre hombre, ahora comprendo porque tiene el tipo que tiene y tan poca grasa. Como Victoria se lo tome todo igual y con las mismas ganas, este hombre no tiene que ganar para complejos vitamínicos.
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