La noticia del divorcio de Iker Casillas y Sara Carbonero ha dejado en shock a todos aquellos que aún creían en el amor, vaya, a los cuatro o cinco que quedaban sin ver 'La Isla de las Tentaciones'. Esta ruptura ha conmocionado a todo un país que los vio sellar su amor en nuestro momento más álgido, la victoria de nuestra selección en el Mundial de Fútbol de 2010.
Un bombazo más triste que ser actor, que te contraten por fin en una película y que sea para interpretar al muerto, pues sí, pero donde se cierra una puerta para lo idílico, se abre una ventana para el salseo. Y ahí está 'Sálvame', ventilando la habitación de la mierda desde tiempos inmemoriales para surtir de un poquito de cancaneo el debate público.
Gustavo González, el periodista, paparazzi y marido de María Lapiedra, ha sacado a la luz una conversación que tuvo con Iker cuando este aún vivía en Oporto.
La grabación de este cafelito que se tomaron entrevistador y entrevistado tiene 2 horas de duración pero, como siempre, la troupe orquestada por Jorge Javier Vázquez (y otros catorce presentadores/as más) la van a ir sacando por fascículos, como los coleccionables del cuerpo humano.
En este primer sorbito de zumo de 'qué fuerte, tía' hemos escuchado a un Iker Casillas muy sincero, cercano y relajado charlando con el periodista. ¿Quién nos iba a decir que este futbolista con cara angelical podía soltar tantos tacos por la boca? Yo no me lo esperaba al menos... Y menos aún teniendo en cuenta que fue imagen de 'Dentix', que seguro que le dejaron la boca bien limpita.
"Las cosas a nosotros nos cambiaron en un año totalmente. Son muchos cambios y tenemos que afrontarlos. No sé el día de mañana que cojones va a pasar. Como está que dentro de dos años nos separamos. Son muchas cosas complejas. Hay más cosas detrás. No solo es la imagen de Instagram", admitía el portero en un extracto de su conversación con Gustavo González que fue ayer emitido por 'Sálvame'.
Gustavo ha apuntado a que ya en Portugal, Iker y Sara vivían en la misma casa, aunque en plantas separadas, llegando a hacer vidas independientes a pesar de estar bajo el mismo techo. Una situación que se prolongó por la pareja a raíz del Estado de Alarma que, por otro lado, también alejó a los medios de su casa haciendo que esta crisis tardara más en salir a la luz.
"Yo esperaba que después del verano ya no pudieran disimular más ese desapego, por cuando los niños empezaran el colegio, que se iba a notar que ya no estaban juntos", admitía Gustavo González, asegurando que Iker esperaba que su ruptura con Sara se filtrara por un paparazzi gallego, que se saltaba el confinamiento para fotografiarles.
Aunque aún la palabra 'divorcio' no figuraba en su vocabulario de las oraciones en tiempo presente, el deportista ya estaba haciendo planes este verano de cómo sería el momento de hacer pública la noticia de su separación de Sara porque, según él, debemos centrarnos más en pensar qué vamos a hacer "a corto plazo".
"El día que me separe lo voy a decir yo. Cuando me dice Sara 'No has venido aquí. Cómo no hemos estado aquí'. Yo estoy muy cansado de este tipo de cosas, la verdad. Con lo que me pasó he aprendido que tampoco puedes estar viviendo así. La cabeza me ha cambiado totalmente", verbalizaba Casillas con las ideas muy claras refiriéndose a su infarto agudo de miocardio.
El programa ha cebado que en los próximos días seguirán desvelando nuevos titulares que Iker Casillas dejó en esta entrevista. Además, Belén Esteban y otros colaboradores tienen claro que se han agotado los autobuses de las excursiones del imserso, ocupados por multitud de mujeres que dicen haber sido amantes del portero.
Vía | Telecinco
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