Mercedes Milá raja sin piedad sobre la manola de Anabel Pantoja a Yulen Pereira en 'Supervivientes': "Somos un país de pajilleros"

No tenemos pruebas pero tampoco dudas de que el concurso de Anabel Pantoja en 'Supervivientes' ha sido cuanto menos, legendario. La queen de la ensaladilla rusa repletita de mayonesa ha llorado, ha reído, se ha enamorado y se ha despelotado. Además, la sobrinísima ha demostrado ser una compañera 10, desestresando a su amante hondureño Yulen Pereira con una manola in situ que ya forma parte de los anales de la televisión.

Pero el masaje holístico de la sevillana a su affaire de la jungla no cosechó muy buenas críticas por aquel sector de la población cuya mentalidad se quedó en los tiempos donde la tele y la vida se veían en blanco y negro. En este área del populacho NO entra nuestra queridísima Mercedes Milá que, aparte de ser moderna como ella sola desde que llegó al mundo, le ha echado un capote a la colaboradora de 'Sálvame'.

Merceditas siempre ha demostrado ser una fiel seguidora del show de famosetes hambrientos. Tanto es así que no dudó en poner a caldo la estancia de Kiko Matamoros en la selva. Ahora, Doña Milá ha publicado un story instagrammero despotricando sobre las personitas que se han echado las manos a la cabeza cuando han visto el manoseo sabanero de la Panto-sobri con el esgrimista.

"¿Cómo se puede ser tan cínico y mojigato como para escandalizarse por algo natural y valioso que hacemos todos desde que aprendemos dónde se toca? (...). Somos un país de pajilleros que durante muchos años han arrastrado la culpa y han vivido aterrorizados por el miedo a que se cumplieran las amenazas de tantos curas que se dejaron engañar y engañaron a esas personas que se acercaron a confesar esas acciones tan naturales como secarse las lágrimas", confiesa la presentadora que también ha decidido deleitarnos con la anécdota guarrindonga de un familiar cuyo descubrimiento del autoplacer le hizo correr a la iglesia a confesarse:

"Prometía que no iba a volver a ponerse la mano encima y sin atravesar la puerta volvía a pensar en esos momentos deliciosos con su gloriosa polla (...). ¿Qué escándalo han montado Anabel y Yulen? ¿Estamos locos o qué?", zanja.