Katia Aveiro, hermana de Cristiano Ronaldo, hospitalizada por Covid tras compartir mensajes negacionistas

Parece que ya estamos viendo cómo el final de la pandemia se está acercando poquito a poco, pero eso no quita que el bichejo haya desaparecido por completo. Si no que se lo pregunten a Katia Aveiro, la hermana de Cristiano Ronaldo.

La muchacha, de 43 años, ha tenido que ser hospitalizada en Madeira (la isla en la que nació) por culpa de unas complicaciones derivadas de su infección por Covid-19.

Como Katia dice, "las noticias viajan rápido", así que ha querido ser ella misma la que lo explique a través de su cuenta de Instagram, en la que acumula más de un millón de seguidores: "Me pilló el maldito virus".

Cuenta que desde el pasado 17 de julio ha estado haciendo cuarentena en su propia casa, con pocos síntomas, hasta que las cosas empezaron a ponerse chungas el día 23. "Tuve una neumonía como consecuencia del maldito virus", explica.

Fue entonces cuando tuvo que ser ingresada en el hospital, donde sigue a día de hoy, "recuperándome gracias a Dios", y asegurando que tiene "mejoras visibles cada día que pasa". "Y lo mejor de todo es que estoy perdiendo el peso que ya había ganado en vacaciones, no todo puede ser malo", aclara. Claro que sí, hija, siempre divina, nunca indivina.

Katia Aveiro... ¿en el club de Miguel Bosé?

Recordemos que en octubre del año pasado fue Cristiano Ronaldo el que dio positivo... Y también fue un día después cuando Katia compartió algunas palabritas en su perfil de Instagram que habría retuiteado el mismísimo Miguel Bosé (si no le hubiesen bloqueado la cuenta, claro).

"Si tiene que ser Cristiano para despertar al mundo, tengo que decir que entonces es un predestinado, un enviado por Dios. A partir de hoy miles de personas ya no creerán en la pandemia, en las pruebas y en las medidas tomadas como yo. Es el mayor fraude jamás visto", escribió en aquellos momentos.

"Una frase que leí hoy y que aplaudí: 'Basta de hacer un mundo de marionetas'. Que alguien abra los ojos, por favor", acabó despachándose. Y bien a gustico que se tuvo que quedar...