Desde que Ana Rosa Quintana abandonó temporalmente el barco del programa que lleva su nombre, los fans echan de menos la emoción de hacer una porra apostando qué gafas lucirá la presentadora, sus zascas a la clase política -generalmente a la extrema izquierda- y sus órdagos a Rocío Flores. Es por eso que la mítica "reina de las mañanas" emérita (de momento) ha decidido hacer un alto en su exilio y lanzar un potente mensaje en Instagram.
"Hace mucho que no publico nada, me han preguntado muchas personas que cómo estoy, por eso me he animado", comenzaba escribiendo en esta imagen donde aparece sonriente, con gafas rojas y con el libro 'Un caballero en Moscú' de Amor Towles sobre su regazo.
Lo cierto es que, como siempre, se ve a Anne Rose estupendísima. Impecable, diría yo. Nada propio de cualquiera que se quede en casa de tranquileo, en pijama y leyendo un libro -o viendo la película del libro en Netflix, que para eso las hacen-. Pero la que es presumida lo es hasta en sus peores momentos, algo que seguramente ha servido a la periodista a seguir luchando contra el cáncer sin desanimarse, tal y como ha transmitido en esta reaparición pública.
Quintana ha dado esperanza al compartir que se encuentra en el último tramo de su tratamiento: "Afortunadamente me encuentro muy bien y ya estoy en la recta final de la quimio", compartía con todos aquellos que se habían interesado por su estado de salud.
"Esto me lo tomo también como un trabajo, comida sana, entrenamiento 3 días a la semana, yoga un día, caminatas largas, disfrutar de la familia, el apoyo de mis compañeros, las miles de personas que que me hacen llegar su cariño y buenos deseos, pensamiento positivo y tener la seguridad de que me voy a curar gracias a nuestros excelentes médicos", acababa de lanzar con optimismo Ana Rosa a sus followers.
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