Cuando la prensa del corazón estaba a puntito de poner rumbo al Cotolengo del chismorreo por falta de noticias salseantes de peso (recurrir a los de 'La Última Tentación' o, peor, a Yola Berrocal), saltó la noticia de la ruptura de Alba Carrillo y Santi Burgoa, el atractivo presentador surfer con carita de niño bueno con el que salía desde antes de su participación de 'GH VIP 7'. Por mucho que digan que lamentan este final de relación, todo es mentira: este tema ha venido como agüita de mayo en esta crisis del cancaneo que atravesamos.
Muchos se han aventurado ya a pronosticar, informar y conjeturar sobre los posibles motivos de la ruptura y cómo habría sentado a Alba Carrillo que se le haya acabado el amor de tanto usarlo. "Se ha liado con alguien conocido de Mediaset", lanzaron desde 'Socialité' este pasado domingo. "Yo noté que sufrir, lo que se dice sufrir…", opinaba JorgeJa tras haber compartido plató con ella el pasado jueves.
El presentador de 'Sálvame' ha añadido que, por mucho que digan desde 'Ya es mediodía', Alba no se está ausentando estos días de sus puestos de trabajo en todos los programas de Mediaset para superar su ruptura, sino porque se encontraba indispuesta y/o, en todo caso, vender la exclusiva a alguna revista:
"La verdad es que yo intuía que algo estaba pasando en su vida porque observo mucho a las personas y no me ha sorprendido la noticia de la ruptura. Veremos a ver qué es lo que dice Alba esta próxima semana, pero sí que es cierto que yo la veo feliz, tranquila, serena", ha continuado el compañero de la ex de Feliciano López (Happyorto, según ella) en 'Secret Story' y 'Sálvame'.
Desde que la Carrillo subiera este finde aquella foto con la que anunciaba su soltería número setecientos cuarenta y ocho, la colaboradora omnipresente de Mediaset tan solo se ha pronunciado para anunciar medidas legales contra aquellos que la han querido pintar como la Fani Carbajo de los pasillos de Telecinco: "Todas las faltas de respeto basadas en mentiras, serán reportadas y tomaré las acciones legales pertinentes para protegerme", comenzaba amenazando la rubia muy legal dirigiéndose a los compañeros de profesión que han lanzado al aire su supuesta infidelidad a Santi.
Pero ojito, hater del clan Carrillo, que tú tampoco te libras. Nuestra prota de comedia americana patria (un desastre en el amor, pero siempre divina y haciéndonos reír) también se ha dirigido a los usuarios de Instagram y Twitter que no han dejado de acosarla desde que anunció su separación del presentador de TeleMadrid: "Esto es una red social, no la Santa Inquisición. Y no admitiré que se digan mentiras con impunidad del anonimato", zanjaba Alba a través de sus instastories.
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