Nada, que no sé cómo hago que siempre se nos pasan las subastas más interesantes. Primero nos perdimos a Hugh Jackman y ahora nos hemos perdido un auténtico objeto de coleccionista, de esos rarunos, pero ¿interesantes?: una puja por el calcetín tapa-pene de Stephen Moyer.
Sí, habéis leído bien, un calcetín tapa-pene, que no es que lo lleve metido en una fundita de lana no vaya a ser que se le acatarre, no, sino que es eso, un calcetín que se pone en salva sea la parte cuando le toca aparecer en pelotas ante las cámaras. Como si así fuera a ser más digna la imagen. Que ya se sabe, desnudo+calcetines=freno a la lujuria, y si es en el pajarito más aún. Sobre todo si con quién te vas a achuchar en directo es tu señora hombre, que digo yo que dará menos corte. Además, Alexander Skarsgard, nuestro sueco favorito (sí, estaba esperando el momento de hablar de él) siempre ha dicho que pasa de esas chorradas, como machote nórdico que es.
De todas maneras, muy loable la causa y una nada desdeñable cantidad de 1.300 euros de recaudación para luchar contra el vertido de petróleo del Golfo de Mexico, con firma de Anna Paquin y todo, que certificará si está usado o no, digo yo. Y el que lo compró... ¿qué hará con él?