Si Paz Padilla fuera la Chusa (su personaje en 'La que se avecina') en la realidad, algún que otro colaborador de 'Sálvame' ya hubiera aparecido agujereado por su "pinsho" tras su discusión en directo con Belén Esteban por su comentado vídeo sobre las vacunas y la variante 'oritrón' y el escaso apoyo de sus compañeros del programa en este tenso momento que se vivió en vivo el pasado 20 de enero, último día que la humorista se dejó caer por Telecinco.
Han pasado 25 días desde que Paz abandonó 'Sálvame' sin miedo a quedarse medio en bolas (dada la rapidez con la que se quitó el micro). La gaditana no ha vuelto a aparecer por el programa de las frutas ni se espera que lo haga, tal y como informamos hace unos días. Padilla parece querer romper con todo lo que significa el epicentro del salseo y así lo ha demostrado con el último gesto con el que nos ha dejado a todos de pasta de boniato.
Se ve que Paz ha pedido consejo a su hija, la influencer Anna Ferrer, en cuanto a venganzas teenagers millennials ahora que es Tiktoker y ha dado con la forma de, elegante y discretamente, hacer justicia por las pullitas de María Patiño y Belén Esteban desde el mismo día de su abandono hasta día de hoy: la presentadora ha dejado de seguir a sus compañeras en Instagram. ¡No ni ná!
Esta forma de Paz Padilla de romper definitivamente con María y Belén evidenciaría de nuevo que la actriz es bastante reacia a volver a 'Sálvame' a pesar del contrato de cadena que la une con Telecinco. Además, todo apunta que la función de becaria de Adela González, el nuevo fichaje del 'Lemon Tea' y del 'Naranja' sería una forma de poner a prueba la validez de la vasca de cara a sustituir a Paz una vez que se confirme su salida definitiva del espacio del corazón.
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