Los negocios desconocidos de Karlos Arguiñano con los que factura más de cinco millones de euros: televisión, motos, hotel... y hasta pelota vasca

Lo de que Karlos Arguiñano tiene mano en la cocina no se puede poner en duda, que ya van muchas generaciones cocinando sus pollos, arroces y pastas. Pero lo de que por las tardes se cambia el gorro de cocinero y el delantal por el traje y el maletín de empresario... De eso no teníamos ni idea.

El cocinero tiene ya 73 años, pero la jubilación todavía se queda lejos. Que no nos imaginamos a Karlitos sentado en un parque, frente a un lago, echando de comer plácidamente a las palomas... Qué va. Pero a lo que vamos, a lo importante: ¿cuáles son los negocios que tanto dinerito reporta al cocinero?

Negocios entre fogones

Vayamos primero a las cocinas. Pero dejemos a un ladito los programas de televisión, que esos ya los conocemos todos. Comenzamos nuestra ruta en la costa de Guipuzkoa. Allí, en un palacete de principios del siglo XX, Arguiñano abrió su restaurante en 1979.

Pero la cosa no se queda ahí, porque años después, en 1990, acondiciona el edificio al completo para que se acabara convirtiendo en un hotel-restaurante de cuatro estrellas. Todo muy íntimo, todo muy familiar, con solo 12 habitaciones. A día de hoy son cinco de sus siete hijos los encargados de gestionar el Hotel KA bajo la empresa Karlos Arguiñano Promociones S.L., que factura de media entre 3 y 5 millones de euros anuales.

Siguiendo con el mundo de los fogones, no se nos puede olvidar repasar la cantidad de libros que ha publicado. Que parece que no, pero los libros dan dinerito (aunque solo a unos pocos, todo hay que decirlo).

Desde que en 1992 publicó el primero, 'El menú de cada día' (hoy toda una reliquia para los coleccionistas), lleva más de 50 títulos publicados y que se siguen reeditando a día de hoy, y de los que ha vendido más de 5 millones de ejemplares a lo largo de su vida.

Televisión, motos y pelota vasca

Ahora sí que sí: nos quitamos el delantal y salimos de las cocinas. Continuamos nuestro recorrido por los negocios de Karlitos empezando por su productora de televisión. En el año 1992 creó la productora Bainet, que se ha encargado de sus programas de cocina, además de otras delicias como 'Bricomanía', 'Hoteles con encanto' o 'Decorgarden' (cómo nos gustan estos programas tan de sábado por la mañana, mientras te tomas el Colacao).

Pero también hay hueco para el sector inmobiliario, claro que sí. En 1997 fundó Irusta Gain S.L., con la que, según 'El Español', facturó en 2019 2 millones de euros, con un beneficio de más de 243.000 euros.

Y seguimos para bingo. Porque Arguiñano, que es un apasionado del motociclismo, decidió meter la cabeza en el mundillo con el equipo 'AGR Racing' junto a Ginés Guirado, todo un referente en el mundillo que falleció en 2012.

A esto le sumamos, quieto parao, ¡una empresa de pelota vasca! Se llama Baiko Pilota, y anualmente se embolsa unos 3 millones de euros gracias a la emisión de partidos en la televisión autonómica ETB, la publicidad estática y anuncios de televisión, alargándose su sombra incluso hasta llegar a las casas de apuesta, según informa 'El Español'.

Una empresa que, por cierto, no tiene mucha fama en el sector. Los jugadores de pelota vasca se pusieron en huelga en 2020. ¿El motivo? Mientras que los ingresos de Baiko Pilota seguían como siempre, decidieron meter tijera y hacer grandes recortes.

Pero si algo nos ha quedado claro es que Arguiñano es un señor que no se puede estar quietecito. Que él te monta una empresa con la misma facilidad con la que te emplata una fideguá. Eso sí, facturando más de 5 millones de euros al año.