Mientras que Belén Esteban amenaza con su "Pim, pam, pum. Tengo una pistola. Pim, pam ,pum. Que dispara sola" a cualquier ser humano viviente que se atreva a mencionar el nombre de Andreíta en televisión, ya que la chiquilla quiere permanecer en el más profundo anonimato pese a ser una celeb desde que llegó al mundo. A la hermanastra de esta, Juls Janeiro, le flipa que los flashes apunten a su persona.
Julia pertenece al amplio colectivo de instagrammers que promociona hasta la marca de supositorios con la que vence el estreñimiento y cuenta con más de 230.000 seguidores en su cuenta de Instagram con tan solo 19 años. Sin embargo, la retoña de Jesulín ha aparcado (de momento) las fotitos cargadas de postureo y los filtros que te dejan el rostro fino y sedoso como el culito de un bebé para ofrecernos su careto al natural.
Y es que por primerísima vez, la influencer se ha dejado ver con la cara lavada. Un gesto aplaudido por su ejército de followers acostumbrado ya a que las capas y capas de make-up embadurnen a su ídola: "Como podéis ver, no tengo la piel perfecta. Tengo imperfecciones, como todo el mundo", confiesa Juls a la vez que se somete a una limpieza facial.
La it girl tiene la frente llena de los granitos propios de su edad y rojeces en las mejillas: "No se trata de tener la piel perfecta, sino sana", explica la hija de Doña Mari Campa mientras el especialista le aplica el tratamiento que necesita su tipo de piel: "La tengo bastante sensible", zanja.
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