Oriana Marzoli ha sido brutalmente agredida en una discoteca por otra mujer y no, no ha sido Marie Kondo tras ver el desastre de habitación que tiene cada vez que hace una historia de Instagram desde allí. La concursante modelo de realities (de lo que no se debe hacer) compartió con sus followers su fatídica experiencia en manos de una agresiva conocida.
“Si os cuento lo que acabo de vivir... O sea, que una mujer, si se le puede llamar mujer, me haya tirado una copa encima, me haya arañado, simplemente por saludar, dar dos besos a mi amigo”, comenzó diciendo muy indignada. Se ve que el cacharro que le tiraron era garrafón y no primera marca, que es lo que ella se merece.
Según ha narrado la afectada, Oriana sigue sufriendo los sinsabores de estar tan buena y ser tan divina de la muerte: “Se ha vuelto loca la novia, si a eso se le puede llamar novia… Qué miedo, de verdad.... Si uno se cree demasiado, pero es que los complejos que tienen las tías y lo que causa la envidia y los celos son muy fuertes”, ha continuado reflexionando nuestra gran filósofa del siglo XXI sacando fuerzas de donde ha podido después de tal agresión.
Demostrando un gran paso de madurez comunicativa al narrar los hechos sin tener un gloss en la mano, Marzoli ha acabado hilando su vivencia con el día a día de las mujeres en nuestro país: “Luego pedimos igualdad entre mujeres, que nos respetemos. Madre mía, qué miedo, qué vergüenza”, añadía elevando el debate de su discurso a una categoría superior.
“También os digo que la entiendo, yo si fuese ella y veo a este semejante diosón saludar a mi novio.... ¡Si es que no se puede estar tan buena como yo! Hasta con el pelo empapado”, zanjaba antes de volver a la fiesta tras demostrar nuevamente que no le hace falta tener abuela.
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